RENDIDO
Pena, que me retuerce en sus dedos...
Miedo, que no se puede aplacar...
Pena es tu recuerdo y mi nostalgia
Y este amor sin esperanza, que me hace tanto mal.
Miedo, del embrujo de tus ojos
Adentrados en mi alma como una maldición,
Rabia, de saberme abandonado
Y entregarme maniatado, al recuerdo de tu amor.
Yo no te pido que vuelvas,
Yo no te pido piedad,
Tiemblo al horror de llamarte
Y saber que no vendrás.
Lloro en silencio el tormento
De no poderte olvidar,
Y me hace daño la angustia
De no verte nunca más.
Llanto, que me arrodilla vencido...
Solo, frente a mi dura verdad...
Siento que es inútil que yo grite
Mi dolor y mi tormento, que nadie escuchará.
Siento, que tu atroz indiferencia
Es la mano del destino que hiere sin piedad,
Y es mi corazón el que se rinde,
Sin perdón y sin defensa, castigado por amar.
Letra : Alberto Andrés Leiva (Abraham Israel Akerman)
Música : Alfredo Cordisco (Alfredo Orlando Cordisco)
Grabado por la
orquesta de Francisco Lomuto con la voz de Carlos Galarce. (26-06-1945)
Grabado
por la orquesta de Alfredo De Ángelis con la voz de Julio Martel. (11-09-1945)