DULCE AMARGURA
Fueron días felices aquellos
Que mecieron mi amor y tu ensueño,
La ternura en tus brazos atraía
Al amparo ideal de tus caricias.
El aliento embriagante de tu boca
Fue veneno después para mi vida,
Copa de dolor que yo bebía con fervor
Sobre esos labios que encendió el amor.
Dulce amargura,
Pena de mi corazón.
Un viento helado un día te llevó,
Y eternas son ahora para mí
Las horas que tu ausencia ensombreció.
Dulce amargura,
Mi tortura y mi obsesión.
¿Por qué tu amada boca me mintió?
Y en tus besos
Y en tus manos
Y en tus ojos
El misterio derramó...
Tanta traición.
Para siempre se ha roto el encanto
Que anidaba en las horas aquellas,
En mi angustia las penas claman tanto
Que las penas hoy son mis compañeras.
Caminante sin prisa ni destino
Por las calles de Dios voy con mi pena,
Tengo por amiga la amargura y es su voz
Quien habla a solas con mi corazón.
Letra : Jorge Torres (Jorge Mario Nazareno Torres)
y Héctor Alperi (Enrique Galperín)
Música : Virgilio San Clemente
Grabado
por la orquesta de Osvaldo Fresedo con la voz de Roberto Ray.