GIMIENDO
Negros barrotes de una cárcel
Borraban para el mundo
La fama de un matón,
Fuerte de agallas y de osadía
En las sangrientas
Contiendas a facón.
Dos costurones, cicatrices
Cruzaban el escracho del matón
Testigos mudos de su acción.
Venga y escuche carcelero
Que un taita arrabalero
Su historia va a contar,
Cuando el acero bien templado
Manchó de rojo la bata de percal.
Bailaba engrupida
Por el ñato Abrojos,
Y manyé en sus ojos
Le hablaba de amor.
Perdí la cabeza
Relució la faca,
Triunfó la destreza
¡Y ganó el mejor!
Venga y escuche carcelero
Y llévele esta carta
Que gime mi sentir,
Que en las penumbras de la cárcel
Un nuevo sol de amor puede lucir.
Diga a la ingrata que no vivo
Que en medio del dolor de mi prisión,
La llevo aquí, en el corazón.
Diga que siempre la recuerdo
Que una nube de odio
Mi espíritu cegó,
Y que la faca del malevo
Por limpiar una mancha... se empañó.
Letra : Juan Pablo Pérez
Música : Luis Mortet (Luis Cluzeau Mortet)
Grabado por Carlos Gardel con acompañamiento
de guitarras. (sello Odeón Nº 18.214)