CAMPANITA

 

 

 

Campanas de un pueblo lejano

Donde nací entre mimos y cuidados,

Donde crecí alegre y muy confiado

Contento en este mundo, con ansias de vivir...

 

Después que pasaron los años

Envueltos en ellos, llegaron los pesares,

Como un cortejo de males a millares

Y fui reconociendo lo amargo del vivir...

 

Campanita... yo te adoro con terneza,

Campanita... tu recuerdo es mi tristeza,

Porque tus sones meciéronme en la cuna

Cuando era mi fortuna la paz de mi sentir.

 

Campanita, campanita de mi aldea

Tu recuerdo, tu recuerdo me rodea,

Y es que quisiera volver con gran anhelo

A aquel rincón de suelo donde empecé a vivir.

 

Letra : Salvador Polito

Música : Juan Polito

 

Grabado por la orquesta de Alfredo De Ángelis con la voz de Julio Martel. (sello Odeón Nº 55.183)

 

 

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LETRA COMPLETA

 

Allá en mi infancia primera

Yo me crié entre mimos y cuidados,

Y fui creciendo alegre y muy confiado

Contento y satisfecho, alegre de vivir.

Después que pasaron los años

Y envuelto en ellos llegaron los pesares,

Como un cortejo de males a millares

Yo fui reconociendo lo triste del sufrir.

 

Fue mi madre...

La que tanto me adoraba,

Que la muerte

De mi lado la alejaba.

Y al poco tiempo, después de esa desdicha

Que me robó la dicha, que tierno disfrutaba,

La cruel parca,

La que me robó a mi madre

¡Implacable!

Se llevó también a mi padre,

Y la campana de aquel tranquilo huerto,

Tañó por aquel muerto

Que solo me dejó.

 

Salí recargado de pena

Porque el dolor me arrancó de aquella huerta,

Y mi existencia quedó triste y desierta

Cual viven los proscriptos, los huérfanos de amor.

Aquellos que todo perdieron

Cual si el destino con ellos se ensañara,

Y su alegría y dicha les matara

Cargando en sus espaldas la cruz de su dolor.

 

Campanita... yo te adoro con terneza,

Campanita... tu recuerdo es mi tristeza,

Porque a tus sones meciéronme en la cuna

Cuando era mi fortuna la paz y la alegría.

Campanita... campanita de mi aldea,

Campanita... tu recuerdo me rodea,

Y es que quisiera volver con gran anhelo

A aquel rincón de suelo donde empecé a vivir.