CHIQUÉ (III)
Con el loco cascabel de tu
reír
Mi alma simple de muchacho,
se embriagó,
Y te amé con locura y mi
pasión
Tu ser sólo anhelaba.
Mas mi dicha para siempre
se esfumó
Al saberte tan sumisa al
interés,
Comprendiendo que los
sueños
Venturosos que forjara
Nunca podían ser.
Te acuerdas con qué
inocencia,
Trazamos nuestros proyectos
En el lejano ayer.
Y mirando al fondo de los
ojos
Pretendimos saber,
El oculto capricho
Que pudiera guardar el
corazón,
Musitando las dulces
ternezas
Que sólo dicta al amor.
Hoy tan sólo vivo del
pasado
Y ya nunca en tus ojos
miraré,
El destello de luz
enamorado
En el cual tantas veces me
gocé.
Sólo tengo a mi amiga, la
tristeza
Y aunque es grande el dolor
de mi tortura,
Yo no quiero que nunca mi
amargura
Interrumpa la dicha de tu
tren...
Letra : Juan Carlos Fernández Díaz
Música : Ricardo Luis Brignolo
(colaboración enviada por el amigo Lito
Carbonell. Punta Alta. 05-2010)