NI SÉ POR QUÉ
Ni sé por qué
Te dediqué este tango...
Ni sé por qué
Te he vuelto a recordar.
Ha de haber sido por lo
mucho que he sufrido,
Al saber que estuve ciego
Ciego y sordo ante tus
ruegos...
Ni sé por qué,
Yo sólo sé
Que el tiempo es mi
escarmiento...
Que es dura y cruel
Mi amarga soledad.
Que el fuego siento de un
brutal remordimiento,
Que es martirio mi delirio,
Que es tenaza que me abraza
Sin piedad...
Dios te trajo hasta mis
brazos
Entre un perfume de lilas,
Y tu paso era de raso
Y era tibio tu regazo,
Y eran mansas tus pupilas...
Por lo mucho que me amaste,
Por lo mucho que sufriste,
De rodillas, mi alma
triste,
Te suplica en su canción:
“Perdón...”
Ni sé por qué
Te estoy llorando ahora...
Ni sé por qué
No supe lo que hoy sé.
Que eras un ángel, que eras
pura en tu blancura,
Y tu mano en mis desvelos
Un pañuelo de consuelo.
Ni sé por qué,
Ni sé por qué
Dejé pasar mi estrella...
Ni sé por qué
Me iluminó tu luz.
Cuando mis ojos se
apartaron de tus ojos
Y mi mano, torpe y mala,
Sin piedad clavó tus alas
En la cruz.
Letra :
V. Juan Clauso
(Venancio
Juan Pedro Clauso)
Música : Tito Ribero
(Amado Alberto Ribero)
(colaboración enviada por el amigo César, desde la R. O. U.,
07-2009)
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