BANDONEÓN (II)
Tu voz se fue insinuando en
las orillas
En una Buenos Aires
inicial,
Melodía llegada en algún
barco
Con nostalgia de luna y
arrabal.
Tu son se fue templando en
las cortadas
Junto al lento bostezo del
farol,
Y fue permaneciendo en las veredas
Propicias a la danza y al
amor.
Cofre abierto de duendes
musicales
Que recorren la piel de la
emoción,
En manos de Pichuco o de
Piazzolla
Tu fuelle fue promesa y
vocación.
Con íntima pasión sueño mis
versos
De poeta con alma de
gorrión,
Bajo un cielo de nubes
desveladas
Yo le canto a tu magia:
Bandoneón.
Tu música sonó para la
bella
Muchachita de trenzas y
percal,
Que marchó por la senda de
la entrega
Tras un sueño negado en el
altar.
Tu acento fue marcando un
dos por cuatro
En noches de milonga y de
ilusión,
Sos emblema de tango en
todo el mundo
Que venera su ritmo
seductor.
Letra : Norma
Ester Montenegro
Música :
Javier Bravo (Javier Eduardo Bravo)