DORITA, LA PORTERA
Silba un timbre de alegría
Cuando se escucha su voz,
Ángel de la portería
Risa como esa, no hay dos.
Su inconfundible figura
Alumbra más que un farol,
Y cambia el día nublado
Por una tarde de sol.
Guarda que viene
llegando...
La campana va a sonar,
Hay que quedarse quietitos
Porque te puede retar.
En el barrio la conocen
Quién no la va a saludar,
Es Dorita, la portera
Nuestra segunda mamá.
Una lechita caliente,
Una rodaja de pan,
Por más que se sienta
triste
Los ojos le brillarán.
Siempre te tiende la mano
Cuando la necesitás,
Pero, tirá un papelito...
Y de su temple, sabrás.
Letra : Marta
Pizzo (Marta Susana Pizzo)
Música :
Mario Valdez (Ernesto Mario Lach)