DEJAME CON MIS PENAS
Me dices que la deje
marcharse, madre mía,
Me dices que no piense ya
más en ese amor,
Que si después de amarla
tan hondo, me traiciona
¡No es digna ni siquiera,
de que le diga adiós!
Se ve que ignoras todo, lo
que en el alma siento,
Se ve que no comprendes mi
pobre corazón,
Yo sé que es una ingrata,
que busca otros quereres
Mas, para maldecirla no
quiero tener voz...
Dejame con mis penas
Dejalo al corazón,
Él sabe lo que hace
¡Dejalo en su dolor!
Dejame que suspire
Por el perdido amor,
Si fue tan inconstante
¿Por qué he de serlo yo?
Dejame con mis penas
Dejalo al corazón,
Que sea, de mi vida
Lo que disponga Dios.
No le deseo males
Ni siento en mí, rencor,
No sabe de venganzas
El verdadero amor...
Yo sé que nunca, nunca,
habrá paz en mi vida,
Yo sé que nunca, nunca, he
de reír al sol,
Y sé que ya en mis labios
no habrá más que suspiros
Y sé que ya en mis ojos, no
habrá más que dolor.
Mas la que tanto daño llevó
a mi pobre alma,
No puedo aborrecerla, ¡de
ello es testigo Dios!
Dejame madre mía, dejame
con mis penas
¡Tal vez ella algún día,
comprenderá mi amor!
Letra : Oscar
Lomuto (Pascual Tomás Lomuto)
Música : Francisco
Lomuto (Francisco Juan Lomuto)
Grabado
por la orquesta de Francisco Lomuto con la voz de Jorge Omar. (06-02-1940)