Un callejón, la taberna,
Un farolito, un buzón,
Y el redoblar de los sapos
En el turbio zanjón.
De guapo se hace oír
Un tango compadrón,
En la temblona voz
De un organito.
Pena de amor
Burbujeando en una
Copa de alcohol,
Y la emoción
De pensar en el pasado.
Allí... Allí...
La calle donde tanto amé,
Maldita como su querer
Encontré mi dolor.
Fatal... Brutal...
Reía con su mueca cruel,
Entregándome sus besos
Con amarga falsedad.
Por qué... Por qué...
Mató mi corazón así,
Forjando una ilusión
Mintiendo un gran amor
Sin pensar en mí...
Letra :
Roberto Lambertucci
Música :
Martín Darré (Martín Vicente Darré)
Grabado
por la orquesta de Osvaldo Fresedo con la voz de Armando Garrido. (12-1950)