BUSCANDO EL NIDO
Tu amor era un perfume de
glicinas
La voz en la penumbra del
zaguán,
Canción de espera, embrujo
de esta esquina
Tenaz en su rutina,
romántica y vulgar.
Quedó por esas tapias de
ladrillo
Tu nombre en la silueta de
carbón,
Entre la magia escondida de
los grillos
Y el ojo del farol, mirando
el callejón.
Vuelvo otra vez, con paso
lerdo
Al barrio gris, fatal de
mis recuerdos,
Llego sin fe, sin paz y
dolorido
Como un gorrión que va
buscando el nido.
Hoy ya no está mi flor
silvestre, ¡No!,
Ni el hogar de tantos años,
Todo ha sido un sueño vano,
Que ha dejado entre mis
manos
Una ilusión.
La vida y el amor cambian
de traje
Por eso muerdo el polvo del
dolor,
Vuelvo vencido, cansado de
este viaje
Copando mi coraje,
sangrando mi rencor.
Tu amor, que no era sórdido
ni oscuro
Un día misterioso, se
perdió,
Es imposible alcanzar el
oro puro
Los sueños de cristal, se
quiebran al llorar.
Letra : León
Arturo Pláceres
Música : Tito
Depérgola (José Depérgola)
Extraído
de una toma radial de la orquesta de Aníbal Troilo con la voz de Jorge Casal.
Grabado
por Olga Cabrera con acompañamiento de orquesta. (letra completa)